Lic. Belén Morteira
14 de Mayo 2024
En la era digital, donde la tecnología se entrelaza con cada aspecto de nuestras vidas, la psicología emerge como un factor indispensable.
En un mundo donde las relaciones se construyen a través de pantallas y donde la información fluye a velocidades vertiginosas, el papel del psicólogo se vuelve aún más relevante, crucial, y por qué no, necesario.
La psicología desempeña un papel fundamental en la promoción de la salud mental en la era digital mediante contenidos en las redes sociales que intentan fomentar los hábitos para nuestro bienestar.
Con el aumento de los problemas como el cyberbullying, o “Hater”, la fatiga digital, la desconexión interpersonal, hasta la ansiedad generada por las redes sociales, los psicólogos están equipados para ofrecer apoyo y orientación tanto a individuos como a comunidades.
Ya sea a través de terapia en línea, programas de intervención o campañas de concienciación, la psicología trabaja incansablemente para proteger y promover el bienestar emocional en un mundo digitalizado.
Por otro lado, la psicología también ofrece perspectivas únicas sobre el impacto de la tecnología en el desarrollo humano. Desde la infancia hasta la edad adulta, el uso excesivo de pantallas puede influir en áreas como la atención, la cognición y la socialización.
Los psicólogos infantiles y del desarrollo están constantemente investigando cómo la tecnología moldea nuestra comprensión y percepción del mundo y cómo podemos fomentar un equilibrio saludable entre la vida en línea y fuera de línea.
En última instancia, la psicología en la era digital nos recuerda que, detrás de cada pantalla, hay una mente humana con sus propias necesidades, emociones y complejidades.
La era “Meme”
No podemos dejar de mencionar la forma de comunicarnos en la era digital. Hablamos todo el tiempo de inteligencia emocional, comunicación asertiva, habilidades comunicacionales, y a las respuestas las realizamos mediante un meme representativo de una emoción. ¿Resulta gracioso? Si. ¿Se debe analizar? También.
La era digital trae aparejado la era de la palabra automatizada, la emoción resumida, la ansiedad exacerbada. Son nuevas formas… ¿mejores? Por supuesto que no… ¿peores? No podemos aseverar una premisa sin analizar lo que esta generación quiere y puede comunicar. Y quizá también, lo que está dispuesta a escuchar.
Aportes de la psicología en la era digital
Existen aportes aplicables a diferentes contextos con los que la persona se rodea actualmente y busca el bienestar emocional.
Terapia en línea y aplicaciones de salud mental: La terapia en línea ha surgido como una herramienta invaluable para hacer que la ayuda psicológica sea más accesible y conveniente. Desde aplicaciones de meditación hasta plataformas de terapia virtual, estas tecnologías ofrecen apoyo continuo a personas que enfrentan una variedad de problemas mentales, desde la ansiedad hasta la depresión.
Cuentas informativas en redes sociales: Esto puede incluir programas de educación digital que enseñan habilidades de inteligencia emocional y resolución de conflictos en línea.
Investigación y desarrollo de tecnología centrada en el usuario: Los psicólogos están contribuyendo en la experiencia de usuario, al diseño de tecnología más amigable para el consumidor. Esto incluye interfaces más intuitivas, funciones de bienestar integradas, etc. Aspectos que requieren del conocimiento de profesionales de la psicología o ramas de las ciencias sociales para mejorar y acompañar la evolución tecnológica.
En conclusión, la psicología en la era digital no solo ofrece una comprensión profunda de los problemas mentales emergentes, sino que también proporciona estrategias prácticas y soluciones innovadoras para abordarlos.
Al adoptar un enfoque holístico que integre la tecnología y la atención centrada en el individuo, podemos trabajar hacia un futuro digital más saludable y equilibrado para todos.
Afortunadamente, la psicología también evolucionó o se “tecnologizó”.
Sin embargo, los problemas psicológicos seguirán siendo de “humanos”. Cambiarán las causas, los síntomas, los tiempos, los humanos. Pero, en definitiva, la psicología seguirá siendo una ciencia de la persona, aplicable a cualquier ciencia, y no cualquier ciencia es aplicable al ser humano, como por ejemplo las inteligencias artificiales que intentan entender una emoción.
Seguramente sea un tema para desarrollar en otro momento.